[Reproducido
de: GreenAgenda.com]
Todos queremos ser sabios y cuidadosos guardianes
del hermoso planeta que llamamos nuestro hogar. Sin embargo, muchos aspectos
del movimiento verde que han invadido todos los segmentos de la sociedad no
tratan sobre "salvar el ambiente". Uno no tiene que indagar mucho
para descubrir las verdaderas creencias y la agenda de los influyentes l’deres
que est‡n intentando imponer su visi—n de un Nuevo Orden Verde sobre el
mundo. Por favor, considere cuidadosamente las implicancias de las opiniones
que ellos expresan tan abiertamente y con toda libertad:
ÒEn la bœsqueda de un nuevo enemigo que nos uniese a todos, llegamos a la idea
que la contaminaci—n, la amenaza del calentamiento global, la escasez de agua,
la hambruna y cosas similares se ajustar’an a la recetaÉ Todos estos peligros
son causados por la intervenci—n humana y es s—lo a travŽs del cambio de
actitudes y comportamientos que pueden ser superadas. El real enemigo es, pues,
la humanidad misma.Ó
-Club de Roma
La Primera Revoluci—n Global,
Consultores de la ONU.
ÒÉnecesitamos tener un apoyo de base amplia, para capturar la imaginaci—n del
pœblicoÉ De modo que tenemos que ofrecer escenarios atemorizantes, hacer
declaraciones simples, dram‡ticas, y y hacer poca
menci—n de las dudasÉ Cada uno de nosotros tiene que decidir cu‡l es El
correcto equilibrio entre ser efectivos y ser honestos.Ó
--Stephen Schenider,
Profesor de Climatolog’a en Stanford
Autor principal de muchos informes del IPCC.
ÒTenemos que conducir este asunto del calentamiento global. Aœn si la teor’a
del calentamiento global est‡ equivocada, Estaremos haciendo lo correcto en
tŽrminos de Pol’tica econ—mica yambiental.Ó
--Timothy Wirth,
Ex Subsecretario de Estado de EEUU
Actual Presidente de la UN Foundation
ÒNo importa si la ciencia del calentamiento global es totalmente falsaÉ El
cambio clim‡tico provee la mayor oportunidad de traer justicia e igualdad al
mundo.Ó
--Christine
Stewart,
Ex Ministra del Ambiente de Canad‡
ÒLa œnica manera de conseguir que la sociedad cambie de verdad es asustar a la
gente con la posibilidad de una cat‡strofe.Ó
--Daniel Botkin, Profesor emŽrito.
ÒEstamos al borde de una transformaci—n global. Todo lo que necesitamos es la
gran crisis adecuada.Ó
--David
Rockefeller,
Miembro ejecutivo del Club de Roma
ÒEstamos pr—ximos a un tiempo en el que toda la humanidad visualizar‡ una
agenda global que comprenda una especie de Plan Marshall Global para enfrentar
las causas de la pobreza y el sufrimiento y la destrucci—n ambiental en toda la
Tierra.!
--Al Gore, La Tierra en
la Balanza,
"Necesitamos un nuevo paradigma de desarrollo en donde el ambiente ser‡ la
prioridadÉ El mundo civilizado tal como lo conocemos terminar‡ prontoÉ Tenemos
muy poco tiempo y debemos actuarÉ Si podemos enfrentar el problema ambiental,
tendr‡ que ser hecho dentro del nuevo sistema, un nuevo paradigma. Tenemos que
cambiar nuestro pensamiento, la manera en que la humanidad ve al mundo.Ó
--Mikhail Gorbachev,Foro Estado del Mundo.
El concepto de soberan’a nacional ha sido inmutable, Por cierto un principio
sagrado de las relaciones internacionales. Es un principio que ceder‡ s—lo
lentamente y con renuencia a los nuevos imperativos de la cooperaci—n ambiental
global.Ó
--Comisi—n de
las Naciones Unidas para el Gobierno Global (1999)
ÒLa Democracia no es una panacea. No puede organizar todo y no est‡ conciente
de sus propios l’mites. Estos hechos deben ser enfrentados directamente. Por
sacr’lego que pueda sonar esto, la democracia no est‡ m‡s capacitada para las
tareas por venir. La complejidad y la naturaleza tŽcnica de muchos de los
problemas de hoy no siempre permiten que los representantes elegidos hagan
decisiones competentes en el momento adecuado.Ó
Club de Roma, La Primera
Revoluci—n Global
ÓLa naciente Òambientalizaci—nÓ de nuestra
civilizaci—n y la necesidad de una acci—n vigorosa en el interŽs de toda la
comunidad global tendr‡ inevitablemente mœltiples consecuencias pol’ticas.
Quiz‡s la m‡s importante de todas sea un cambio gradual de las Naciones Unidas.
Inevitablemente, debe asumir algunos aspectos de un Gobierno Mundial.Ó
-Mikhail Gorbachev,
Miembro del Club de Roma, - Foro Estado del Mundo, 1996.
ÒSe require un Nuevo Orden Mundial para manejar la
crisis del Cambio clim‡tico.Ó
--Gordon
Brown, - Primer Ministro Brit‡nico.
ÓEn mi visi—n, despuŽs de cincuenta a–os de servicio en el sistema de las
Naciones Unidas, percibo la urgencia m‡s perentoria y absoluta de un adecuado
Gobierno de la Tierra. No hay sombra de dudas de que los actuales sistemas
pol’ticos y econ—micos ya no son apropiados y llevar‡n al fin de la evoluci—n
de la vida en este planeta. Por consiguiente debemos absoluta y urgentemente buscar
otros caminos.Ó
-Dr. Robert
Miller,
Ayudante del Secreterio General de la ONU
ÓEl regionalismo debe preceder al globalismo. Prevemos un sistema perfecto de
gobierno de las comunidades locales, estados individuales, uniones regionales y
hacia arriba hasta las mismas Naciones Unidas.Ó
-Informe de la
Comisi—n para el Gobierno Global de la ONU (1999)
ÓLa alternativa al actual orden mundial puede surgir s—lo Como resultado de una
nueva dimensi—n del progreso humanoÉ Visualizamos una revoluci—n de la mente,
una nueva manera de pensamientoÉÓ
-Mikhail Gorbachev, Foro Estado
del Mundo, 1996.
ÓRequerimos de un principio de organizaci—n central – uno consensuado
voluntariamente. Los cambios menores en las pol’ticas, mejoras moderadas en
leyes y regulaciones, Ret—rica ofrecida en lugar de un cambio genuino –
todas estas son maneras de apaciguamiento, dise–adas para satisfacer el deseo
del pœblico de creer que sacrificio, lucha, y una trabajosa transformaci—n de
la sociedad no ser‡ necesaria.Ó
-Al Gore, de La Tierra
en la Balanza.
ÓLa adopci—n de un principio de organizaci—n central Significa embarcarse en un
esfuerzo total para usar Toda pol’tica y programa, toda ley e instituci—n para
Detener la destrucci—n del ambiente.Ó
-Al Gore, de La Tierra
en la Balanza.
ÓLa ejecuci—n efectiva de la Agenda 21 requerir‡ de una profunda reorientaci—n
de toda la sociedad humana, a diferencia de cualquier cosa que el mundo haya
experimentado, un cambio mayor en las prioridades de los gobiernos y los
individuos, y una redistribuci—n sin precedentes de los recursos humanos y
financieros. Este cambio exigir‡ que se integre en cada individuo y en cada
nivel de decisi—n colectiva una preocupaci—n por las consecuencias ambientales
de cada acci—n humana.
--extracto, Agenda
21 de las Naciones Unidas.
ÓEl actual curso del desarrollo es tal modo insostenible. Los actuales
problemas no pueden ser resueltos por medio de medidas graduales. M‡s de lo
mismo no es suficiente. Los cambios radicales en la trayectoria actual no es
una opci—n sino una necesidad absoluta. Se requieren ahora cambios econ—micos,
sociales y culturales fundamentales que enfrenten de ra’z las causas de de la
pobreza y la degradaci—n ambiental.Ó
-del sitio web
Earth Charter
ÓÀNo es la œnica esperanza del planeta que las civilizaciones industrializadas
colapsen? ÀNo es nuestra responsabilidad de que ello ocurra?Ó
-Maurice Strong, ex Secretario General del UNEP
ÓYo veo a los principios del Cartel de la Tierra como una nueva forma de los Disez Mandamientos. Ellos establecen los cimientos para una
comunidad global sustentable e la Tierra.Ó
-Mikhail Gorbachev, Miembro del
Club de Roma.
ÒLa gran amenaza para el planeta es la gente: hay demasiada, viviendo muy bien
y quemando demasiado petr—leo.Ó
-Sir James Lovelock, Entrevista en la BBC (2002)
ÒÉlos actuales estilos de vida y patrones de consumo de la clase media pudiente
–involucrando alto consumo de carne, uso de combustibles f—siles,
artefactos domŽsticos, aire acondicionado, y hogares en los suburbios- no son
sustentables. Es necesario un cambio que exigir‡ un reforzamiento del sistema
multilateral, incluyendo a las Naciones Unidas.Ó
-Maurice Strong, fundador del UNEP,
Discurso inaugural de la Cumbre de la Tierra R’o 1992
ÒLos humanos en la Tierra se comportan de alguna manera como un microorganismo
pat—geno, o como las cŽlulas de un tumor.Ó
--Sir James Lovelock,Curando a Gaia:
medicina Pr‡ctica para el Planeta (1991)
ÒNo afirmo tener ningœn interŽs en la historia natural, pero cuando ni–o me daba
cuata de la fluctuaci—n en la cantidad de animales de caza y la necesidad de
ajustar el recorte al tama–o de la poblaci—n sobrante.Ó
--prefacio de
'Down to Earth', del Pr’ncipe
Felipe
ÒUna poblaci—n total de 250 a 300 millones de personas, una disminuci—n del 95%
de los niveles actuales ser’a ideal.Ó
--Ted Turner, fundador de
CNN y gran donante de la ONU
Si fuese a reencarnarme me gustar’a regresar a la Tierra como un virus asesino
para disminuir los niveles de la poblaci—n humana.Ó
-Pr’ncipe
Felipe, Duque de Edimburgo,
Due–o del Worldwide Fund
for Nature (WWF)
ÒTener hijos deber’a ser un crimen contra la sociedad digno de castigo, a menos
de que los padres tengan una licencia del gobierno. A todos los padres
potenciales se les deber’a requerir el uso de anticonceptivos, y el gobierno
entregando ant’dotos a los ciudadanos elegidos para tener hijos.Ó
--David Brower, Director Ejecutivo del Sierra Club
La Humanidad est‡ sentada sobre una bomba de tiempo. Si la gran mayor’a de los
cient’ficos del mundo est‡n en lo cierto, tenemos apenas 10 a–os para evitar la
mayor cat‡strofe que podr’a enviar al sistema clim‡tico del planeta a un
vŽrtigo de destrucci—n Žpica que involucra condiciones del tiempo extremas,
inundaciones, sequ’as, epidemias y olas de calor asesinas m‡s all‡ de cualquier
cosa que hayamos experimentado –una cat‡strofe de nuestra propia
producci—n.Ó
--Al Gore, Una Verdad
Inc—moda.
ÒEl cambio clim‡tico es la mayor amenaza que la humanidad haya enfrentado
jam‡s.Ó
--Angela Merkel, Canciller de
Alemania.
ÒÉel cambio clim‡tico es real. No s—lo es real, est‡ aqu’, y sus efectos est‡n
haciendo surgir un aterrante nuevo fen—meno global: el desastre natural causado
por el hombre.Ó
--Barak Obama, Candidato
Presidencial de los EEUU.
ÒSimplemente debemos hace todo lo posible para frenar el calentamiento global
antes de que sea demasiado tarde.Ó
--Arnold Schwarzenegger, Gobernador de
California
ÒEl Cambio Clim‡tico deber’a ser visto como el mayor de los desaf’os que nunca
haya enfrentado la humanidad.Ó
--Pr’ncipe
Carlos de Inglaterra
ÒEl cambio clim‡tico no hace a todos ciudadanos globales, estamos realmente
todos juntos en esto.Ó
--Gordon Brown, Primer
Ministro Brit‡nico
El Destino de la humanidad, como el de la religi—n, depende del surgimiento de
una nueva fe en el futuro. Armados con esa fe, podr’amos hallar que es posible resantificar a la Tierra.
-Al Gore, La Tierra en la Balanza
ÒQuŽ incre’ble planeta en el Universo ser‡ este cuando seamos una sola familia
viviendo en justicia, paz, amor y armon’a con nuestra Divina tierra, con cada
uno de nosotros y con los cielos.Ó
--Robert Muller,
Fundador de la UNESCO
ÒLa Tierra es literalmente nuestra madre, no s—lo porque dependemos de ella
para nuestro alimento y refugio, pero mucho m‡s porque a la especie humana le
ha sido dada su forma por ella en el vientre de la evoluci—nÉ Nuestra salvaci—n
depende de nuestra habilidad de crear una religi—n de la naturaleza.Ó
--Rene Dubos,
Miembro del directorio de Planetary Citizens
ÒEs la responsabilidad de cada humano de elegir hoy entre la fuerza de la
oscuridad y la fuerza de la luz. Por consiguiente debemos transformar nuestras
actitudes y adoptar un renovado respeto por las superiores leyes de la DIVINA
NATURALEZA.Ó
--Maurice Strong,
(ex Secretario General de UNEP),
Discurso de apertura de la Cumbre de la Tierra R’o 92
ÒEl esp’ritu de nuestro planeta se agita! La Conciencia de la Diosa Tierra se
est‡ levantando en contra todas las probabilidades, a pesar de milenios de
supresi—n, represi—n y opresi—n infligidas sobre Ella por una engre’da y
equivocada humanidad.
La Tierra es una entidad viviente, un organismo biol—gico con dimensiones
ps’quicas y espirituales. Con la expansi—n de las religiones patriarcales que
hicieron foco sobre un Dios masculino estacionado majestuosamente en el cielo
gobernando sobre la tierra y el Universo, la memoria de la innata Divinidad de
nuestro planeta fue reprimida y prohibida en el inconciente colectivo de la
humanidad.Ó
--Envision Earth
ÒAœn m‡s importante es la implicancia de que la evoluci—n del homo sapiens, con
su inventiva tecnol—gica y red de comunicaciones de incrementada sutileza, ha
aumentado de gran manera el rango de percepci—n de Gaia. Ella est‡, a travŽs
nuestro, despierta y conciente de ella misma. Ella ha visto el reflejo de su
rostro a travŽs de los ojos de los astronautas y las c‡maras de televisi—n de
naves en —rbita.
Nuestras sensaciones de maravilla y placer, nuestra capacidad de pensamiento
conciente y especulaci—n, nuestra incansable curiosidad e impulso son para que
ella las comparta. Esta nueva interrelaci—n entre Gaia y el hombre no est‡ para
nada totalmente establecida todav’a; no somos aœn una especie realmente
colectiva, acorralada y domesticada, de modo que las fuerzas fieras, destructivas
y avariciosas del tribalismo y el nacionalismo est‡n fundidas en una urgencia
compulsiva de pertenecer a la comunidad de todas las criaturas que constituyen
Gaia.Ó
--Sir James Lovelock,
Gaia: Un Nueva Mirada a la Vida
ÒPoco a poco un libro planetario de oraciones est‡ siendo compuesto por una
humanidad en una uni—n creciente buscando su identidad. Una vez m‡s, pero ahora
a una escala universal, la humanidad est‡ buscando nada menos que su reuni—n
con la 'divinidad', su trascendencia a formas superiores de vida. Los Hindœes
llaman a la Tierra como Brama, o Dios, porque acertadamente ellos no ven
diferencia entre nuestra Tierra y lo Divino. Esta antigua y simple verdad est‡
lentamente amaneciendo otra vez sobre la humanidad cuando estamos a punto de
entrar nuestra edad c—smica y convertirnos en lo que siempre hemos debido ser;
el planeta de Dios.Ó
--Robert Muller,
Ex Secretario General Asistente de la ONU,
Fundador de la UNESCO
ÒÀQuŽ pasar’a si Mar’a fuese otro nombre de Gaia? Entonces su capacidad para un
nacimiento virginal no es un milagroÉ es uno de los roles de Gaia desde que la
vida comenz—É Ella es de este universo y, concebiblemente, parte de Dios. En la
Tierra ella es la fuente de la vida duradera y est‡ viva ahora; ella le dio
vida a la humanidad y somos parte de ella.Ó
--Sir James Lovelock, Las Edades de Gaia
ÒLa Naturaleza es mi dios. Para m’, la naturaleza es sagrada; los ‡rboles son
mis templos y los bosques mis catedrales.Ó
--Mikhail Gorbachev,
Green Cross Internacional
ÒEl sentido espiritual de nuestro lugar en la naturalezaÉ puede ser rastreado
hasta los or’genes de la civilizaci—n humanaÉ El œltimo vestigio de la
adoraci—n organizada de diosas fue eliminado por el Cristianismo.Ó
--Al Gore, La Tierra en
la Balanza, p‡g. 260
ÒYo prometo fidelidad a la Tierra y a todas sus partes sagradas. Es el agua,
tierra y cosas vivientes y todos sus corazones humanos.Ó
-Earth Pledge, Global Education Associates
ÒAl promover un profundo sentido de conexi—n con los otros y con la tierra en
todas sus dimensiones, la educaci—n hol’stica alienta un sentido de la
responsabilidad hacia uno mismo, los otros, y hacia el planeta.Ó
--Alianza
Global para la Transformaci—n de la Educaci—n
ÒLa Tierra no es materia muerta. Ella est‡ viva. Ahora comienza a hablar con la
Tierra a medida de que caminas. Puedes hablar fuerte, o s—lo hablarle a ella en
tu imaginaci—n; Enviarle tu amor a ella con tu respiraci—n. Sentir tu coraz—n
tocando sobre el coraz—n del planeta. Decirle a ella cualquier palabra que
lleguen a tu boca: Madre Tierra, te amo. Yo te bendigo, Madre Tierra. Que seas
curada. Que todas tus criaturas sean felices. Para ti, Madre Tierra. En nombre
de la raza humana, yo te pido perd—n por haberte herido. Perd—nanos, Madre
Tierra.Ó